Reseña: Matar un Reino de Alexandra Christo

¡Hola Soñadores! ¿Cómo andan? ¡¡Feliz día Nacional del Libro!!.
Me gustaría contarles que hoy, el Blog cumple 1 AÑO. Aún no puedo creer que haya pasado tanto tiempo, pero sí puedo decirles que adoro este mundo al que decidí entrar hace tanto tiempo y a las bellas personas que integran esta comunidad. Espero pronto poder adelantarles más sobre un sorteo que pienso hacer, como regalo para ustedes que me leen.
Pero por ahora, les contaré acerca de esta lectura tan especial que he tenido, un retelling de La Sirenita.
No voy a mentir. Le tenía muchas ganas a esta historia cuando ví que salió en España. Los retelling son algo que me fascina y más aún cuando tienen un toque de oscuridad.

En este caso, nuestra sirenita es toda una asesina, así que pueden imaginarse lo oscura que es esta historia.

La autora nos presenta un mundo que se divide en 100 reinos humanos, cada uno con sus reyes y príncipes, y además un reino marino gobernado por la Reina del Mar, donde viven las sirenas, tritones y nereidas.
En este sentido, para mí, la autora logra una clara descripción de este mundo. Podía sentirme navegando las aguas en el Saad, subiendo la gélida montaña en Pagos, entre un millón de paisajes distintos.
La historia está contada desde el punto de vista de Lira y Elian. La primera es hija de la Reina del Mar y las más despiadada de todas las sirenas -esta es nuestra bellísima Sirenita-. Elian, por otro lado, es el "príncipe". Ambos puntos de vista, a lo largo del libro, nos permiten ver distintos enfoques sobre la aventura que nuestros protagonistas emprenden y de los sentimientos que comienzan a formarse entre ellos.
Primero, lo más sensato sería que los introdujera a dichos personajes.
Lira es una princesa, la hija heredera de la Reina del Mar. Es una sirena despiadada y poderosa. En su cultura, coleccionar los corazones de sus víctimas es un símbolo de poder, y su cuarto contiene 17 corazones humanos: uno para cada año de vida. Pero no son corazones cualquiera, son corazones de príncipes. Tal es su status y su poder que únicamente caza corazones de príncipes. Al principio se la muestra como un personaje frío y cruel; aunque a partir de sus recuerdos podemos ver que no siempre fue así y que lo que la ha cambiado/moldeado ha sido la presión de la reina. A lo largo de la historia, sobre todo luego de conocer a Elian, comienza una transformación que le permitirá ver el mundo de otra forma. Este cambio en ella, a mi entender, se dio muy deprisa. El libro es auto conclusivo, así que no había tiempo de meterse en tanto detalle, pero aún así no me convenció como se dio.

A pesar de ser un retelling gótico, el amor termina jugando un papel muy fuerte en la evolución de Lira y teniendo en cuenta lo cruel que era al principio del libro -y que por poco estuvo a punto de matar a Elian- uno pensaría que no sería tan fácil volverla buena. Este fue el único aspecto que no termino de convencerme y el motivo por el cual no obtuvo la máxima puntuación.
Elian es el príncipe dorado, hijo del rey gobernante del reino de oro. Pero no todo es lo que parece, desde un primer momento lo conocemos como realmente es: un pirata en constante lucha con el mar, con las bestias que allí habitan, dando caza a las sirenas que tantas vidas humanas se han cobrado. A pesar de su linaje, su pasión es el Saad, su tripulación y el mar. Odia cuando debe volver a su hogar a cumplir con su deber real aunque sea por pocos días. Eso es algo que me gustó de este personaje, la sinceridad de sus acciones y lo fiel que resulta a sus sentimientos. Aunque confesaremos que peca un poco de ingenuo y algo egocéntrico. Por lo demás, me ha caído mejor que Lira.
El castigo que la reina del mar le impone a su hija porque cree que es débil, la obligará a convivir con Elian y su tripulación, emprendiendo un viaje que puede tanto salvar a los reinos, como destruirlos. Allí, ambos lidiaran con la desconfianza que se profesan, con una travesía llena de trampas, piratas traicioneros y una realeza aún más engañosa; que los obligará a formar una sólida confianza mutua que se terminará convirtiendo en la clave para unir ambos mundos.

En resumen, Matar un Reino es un retelling más oscuro y auto conclusivo del clásico La Sirenita. Con una sirenita despiadada y un príncipe pirata, que deberán aprender a confiar el uno en el otro por el bien de la supervivencia de ambas especies. Aunque ello pueda significar que todo lo que uno creía de la vida del otro fuera completamente mentira y deban comenzar a verse con otros ojos.

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